Aquí, en España, estamos muy acostumbrados a las jornadas de trabajo habituales de 40 horas semanales, normalmente distribuidas en bloques de 8, de lunes a viernes. Esto permite al trabajador descansar sábados y domingos, reiniciando el ciclo indefinidamente cada lunes. Por supuesto, existen otros tipos de organización de horarios y días, pero, sin duda, esa es la mayoritaria.
Sin embargo, resulta interesante conocer que, fuera de nuestras fronteras, existen otras variantes organizativas. Hablamos del conocido como turno americano, que es muy exigente y mucho más duro que otras modalidades de trabajo más clásicas. A continuación te contaremos en qué consiste y cuáles son sus variantes.
Turno americano de trabajo
En primer lugar, has de saber que existe mucha confusión con el denominado turno americano. Para empezar, hay quien lo conoce también como turno africano (no sabemos si por vincularlo con el esclavismo, dada su dureza), o incluso como turnos rotativos.
No obstante, como veremos más abajo, si bien en cualquier modalidad suele haber rotación de horarios, la modalidad más clásica es la realmente exigente.
El turno americano de trabajo proviene de EE.UU., donde es relativamente habitual en negocios de hostelería y en aquellos que necesitan estar funcionando las 24 horas del día. Sin duda, se trata de una organización del trabajo que desgasta mucho al trabajador y que altera continuamente su descanso, cambiando constantemente el ritmo circadiano del cuerpo.
¿Cómo funciona el turno americano?
Existen muchos tipos de turnos americanos por ahí fuera, pero el auténtico, el ‘pata negra’, es el que te voy a describir a continuación.
En el turno americano, lo primero que haces en tu puesto de trabajo es una jornada de tarde, que suele ser de 7 horas (típicamente de 15:00 a 22:00 h). A eso le sigue al día siguiente otra jornada de mañana de 8 horas (de 7:00 a 15:00 h). Y, finalmente, dentro de ese mismo día, acabas con otra jornada nocturna de 22:00 a 7:00 h, añadiendo 9 horas más.
Sí, estás en lo cierto, es una paliza impresionante, sobre todo a medio/largo plazo. En total son bloques de 24 horas de trabajo, a las que suelen suceder tres días y medio de descanso: esa es la parte positiva. De este modo se completa un ciclo de cinco días en total, que se repite sin cesar, independientemente del día de la semana que sea.
Al completar una semana natural mediante el turno americano, se habrán realizado un total de 48 horas de trabajo, ocho más del máximo legal en España. Eso sí, todas esas horas se pagan (a cuánto ya es otro tema…) y allí el cobro suele ser semanal en vez de mensual.
Como puedes comprobar, existe muy poco descanso entre los tres turnos, lo que dificulta enormemente la vida del empleado. Por desgracia, hay mucha gente para la cual es complicado tener un trabajo bien pagado, y hay muchos trabajadores realizando este tipo de jornadas para ganarse la vida.
Turno americano 6×2
Como decíamos antes, existen numerosas variantes del turno americano, que son más conocidas como turnos rotativos y que sí suelen verse más a menudo por España. Esta modalidad es una de ellas.
El turno americano 6×2 no es más que una organización de jornadas en la que trabajas seis días seguidos y luego descansas dos. Si se decide aplicar la rotación de turnos, en el primer ciclo semanal trabajas por la mañana, en el segundo, por la tarde, y en el tercero, de noche. Al finalizar el tercer bloque, se reinicia.
Turno americano 7×2
Esta no es más que una variación de la anterior. El turno americano 7×2 tiene también tres ciclos que se repiten (mañana, tarde y noche), sólo que con siete días de trabajo seguidos de dos de descanso.
Cuando esto se aplica a jornadas españolas de 40 horas semanales, obviamente sólo hay dos opciones: o se abonan horas extra o se trabajan menos de 8 horas por día. Lo mismo sucede, claro está, en el tipo 6×2. De lo contrario, estaríamos hablando de jornadas ilegales.
Otros tipos de turnos americanos
Por último, hay que mencionar que existen otras posibles variaciones del turno americano, pero en esencia funcionan igual que los anteriores. Los hay de 6×1 y 7×1, por ejemplo. Esos son aún más duros, pues tan sólo ofrecen un día de descanso por ciclo. También hay variantes del 6×2 y del 7×2, que al tercer ciclo añaden un tercer día extra de descanso.
Lógicamente, el número de horas de trabajo por día deberá ser reducido para cumplir con la legislación española, pero aún así se trata de bloques muy intensos.
Va a ser difícil que te encuentres en España una oferta de trabajo con el turno americano clásico, sin embargo, las otras variantes sí suelen estar más extendidas. Al menos ahora estarás advertido de lo que puedes esperar.
En definitiva, esperamos que te haya quedado meridianamente claro lo que es el turno americano de trabajo. Bajo esta perspectiva, las ventajas del teletrabajo, que la pandemia ayudó a difundir, parecen mayores que nunca, pero hay empleos que nunca se podrán realizar a distancia.
